Mis PP. Misioneros
Mi insuficiencia pudiera escusar esta carta, pero no puedo
dejar de cumplir con la obligazión y santa costumbre que ha
havido y [h]ay de escrivir por despedida a V Ras y dar muchas
gracias a Dios nuestro Sr y también a V. Ras por el gran
celo con que se aplican a mirar por la gloria de Dios en pri-
mer lugar, y por el bien de tantas almas redimidas con el
precio infinito de la* sangre de N. Sr Jesu-Christo que
están a su cargo en estas santas Doctrinas, yo ruego
a Dios con todas las veras posibles y con todo el afecto que
devo, asistan V. Ras con todos los auxilios eficaces de su divina
gracia, para poder llevar no solo con paciencia y facilidad, sino
con alegría, los travajos que se pueden ofrecer en su santo
servicio por su santo amor y salvazión de las almas, que el mis-
mo Sr les tiene encomendadas.
La mucha aplicazión y empeño con que todas V. Ras se
esmeran con la buena crianza y educazión de todos, grandes,
y pequeños, domésticos y esternos, se vee y se experimenta en
el summo respeto y venerazión con que todas tratan, no solo a
los Superiores mediatos e inmediatos y curas, sino también
a todos los demás PP. y Hermanos veese también en la