pues de averlo consultado, y con pareçer de los Padres Consultores, q[u]e que [sic] en nuestras rancherias, no se permitan criar dichos mestizillos, y mulatos, sino es constante ser estos hÿos de nuestros negros, y en el caso y con las calidades que permite Nuestro Padre General, que se crien en ella los españolitos expouestos.![1]
Añade su Paternidad en la misma Carta; Es grandissimo desorden, y ageno de lo que en la Compañia se a praticado, la fa[l]ta del secreto de nuestras cosas, que llega a ser tan grande que qua[n]to pasa en casa ser vierte [sic] a los seculares, hasta las mismas penitencias, que se dan a los sugetos con las circunstancias, de los ponderaciones de ellos, dizen se comunican a los seglarès, y luego que llegan las Cartas de Roma, y se publican los ordenes. La primera accion de algunos, dicen es ir a contarlas alguna visita. Facilidad, y ligereza, mas parece de niños, que de hombres, de algun juizio, y razon; haran los Superiores una cosa muy de su obligacion, y de mi gusto, y aprovacion, si al primero que cogieren esta ligereça le dire una Penitencia tal, y tan buena que tenga bien que contar en ella si la quisiere. Contar a los seglares; despues de esto (a que no tengo que añadir, sino encomendar su vigilancia, y execucion a V, R.a) solo digo que V R.a observe exactamente, tanbien y rigurosamente con sus Consultores como les esta mandado lo que dispuso y ordeno Nuestro Padre General Juan Pablo de Oliva siendo Vicario General en su Carta de 22 de marzo de 1662 executa[n]do con ellos las penas establecidos Post quam recum Consultoribus suis examinata sibi delicti, qualitate et veritate constiterit, y me avisara V R.a de lo que en esto parte huviere obrado.
Algunos de mis antecessores con santo zelo de primer la observancia, y prevenir algunos daños, que amenazaban pusieron algunos preceptos de santa obediencia comunes a toda la Provincia, y a
pues de averlo Consultado, y Conpareçer delos Padres Consultores, q.e
que [sic] en nuestras Rancherias, nose permitan Criar dichos Mestizillos,
y Mulatos, sino es constante ser estos hÿos de nuestros Negros, y enel
Caso y Conlas Calidades que permite Nuestro Padre General, quese
Crien en ella los Españolitos expouestos.!
Añade su Paternidad enla misma Carta; Esgrandissimo
desorden, y ageno delo que enla Compañia se apracticado, lafata
del secreto de Nuestras cosas, que llega aser tan grande que quāto
pasa en casa ser vierte [sic] alos Seculares, hastalas mismas Penitencias,
que sedan alos Sugetos conlas Circunstancias, delos ponderaciones
de ellos, dizense Comunican alos Seglarès, y luego que llegan las
Cartas de Roma, y sepublicanlos Ordenes. La primera accion
de algunos, dicen es ir acontarlas alguna Visita. Facilidad, yli
gereza, mas parece de niños, que de hombres, de algun juizio, y ra
zon; haranlos Superiores una cosa muy desu Obligacion, ydemi
gusto, y aprovacion, si al primero que cogieren esta ligereça ledire
Una Penitencia tal, y tan buena que tenga bien que tenga Contar
en ella sila quisiere. Contar alos Seglares; Despues de esto (aqueno
tengo que añadir, sino encomendar su Vigilancia, y execucion
a V R.a) Solo digo que V R.a observe exactamente, tanbien y rigu
rosamente consus Consultores comoles esta mandado loque dispuso
y ordeno Nuestro Padre General Juan Pablo de Oliva siendo Vi
cario General ensu Carta de 22. de Marzo de 1662. executādo
con ellos las penas establecidos Post quam recum Consultoribus
suis examinata sibi delicti, qualitate et veritate constiterit, y
me avisara V R.a deloque en esto parte huviere obrado.
Algunos demis antecessores con Santo zelo de primer la Obser
vancia, y prevenir algunos daños, que amenazaban pusieron algu
nos Preceptos deSanta Obediencia Comunes atoda la Provincia, y a
- ↑ O sinal de exclamação provavelmente foi acrescentado para chamar a atenção ao que está sendo relatado.