mantenido estos indios en lo espiritual, y temporal debaxo de la direccion y enseñanza de los de la Comp[añi]a, y para resistir, y hacerse terrible a tan poderosos contrarios, es muy necesario, que en esta Comunidad de Missioneros aya mucha union, y caridad; y que sea como esquadron bien unido, y ordenado. Terribilis ut castrorum acies ordinata[1][2].
La 4.a es porque los sugetos en estas, y semejantes Misiones viven privados por Xp[ris]to del trato y comunicacion de gente politica por no ser los indios capaces de que se trate con ellos, sino es de lo que conduce a lo espiritual, y temporal de sus Pueblos. Y si a esto se añade la poca union, caridad, y confianza de unos con otros, es preciso q[u]e sea especial el desconsuelo de los sugetos, y que muchos esten piando por la vida de los Colegios, y que de los Colegios no pidan pasar â estas Doctrinas, por no verse priva[dos] del gusto de la vida sociable, caritativa y unida entre unos y otros.
Porque esta union, y caridad es la que suaviza, y endulça la amargura de los trabajos de una Comunidad Religiosa, segun nos expresa el psalmista. O quam bonum, et incundum habitare fratres in unum[3]. Es la que conviene en pa[ra]yso terrestre a la Religion. Es la voz mas gustosa dulce, y sonora que se oie en este mundo; y la q[u]e con mas suabidas y eficacia atrae a muchos del mundo a la Religion, como enseña la esperiencia, y dixo agudam[amen]te S. Agustin. Nihil auditur dulcius nihil optatur delectabilius, nihil posidetur utilius, quam obrem dixit David, O quam bonum, et quam incumdum habitare fratres in unum: iste dulcisonus, ista melodia monasteria peperis porque el que ama a su proximo. Como deve, este vive como si estuviera en el parayso siempre alegre, y contento, qui alios diligit; sicut debet ita vivit in terra, quasi esset in caelo, semper gaudens. Y al contrario la desunion convierte en un infierno, la mas florida, sabia y dulce comunidad.
Pero callen todas las demas razones, y motivos quando sabemos, q[u]e este es el precepto proprio del Christo. Hoc est preceptum misum ut diligatis in vicem[4] este es el precepto nuevo, que por exemplo y palabras nos intimò el
- ↑ Ct 6, 3.
- ↑ B. Ibañez Echávarri, El Reino Jesuitico, 84: na edição impressa do El Reyno, Ibañez cita a p. 219, mas na referida página é somente onde inicia a mencionada carta e não a citação dela aqui indicada.
- ↑ Sl 133 (132), 1.
- ↑ Jo 15, 12.