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en que sucedieron robos, y aun muertes, yendo por Capitan de los inquietos uno de los Jesuitas, es preciso que el que en esta vá como orden sério y no mas, pase á ser precepto: y asi mando, en virtud de santa obediencia, y pena de pecado mortal, que ninguno de los nuestros ayude con su consejo, y mucho menos incite y concurra con su persona, é influxo á semejantes inquietudes, antes bien que hagan todo lo posible por apaciguar los ánimos que reconocieren inquietos, y mal aficionados á los Vasallos del Rey de Portugal; y asi lo insinuará V. R. en las citadas Doctrinas ó Missiones, ut supra etc.
76 Al intimarle el Padre Provincial Joseph Aguirre el año de 1722, dice asi (3): Aunque me consta que el Informe que hicieron á nuestro Padre General Miguél Angel Tamburini, que motivó el precepto que intimó á Vs. Rs. es totalmente siniestro, y ageno del hecho de la verdad, y del proceder muy religioso de los sugetos que moran en estas Doctrinas, segun tengo informado á su Paternidad, remito á Vs. Rs. un tanto de dicha Carta, en que se contiene dicho a precepto, para que los Padres Curas hagan poner un trasumpto entre los demas preceptos de su Parternidad. Pues á que fin era hacer constar á todos los Padres de Misiones de esta su mentira el Padre Provincial Aguirre?

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