Mi[1] P. Superior Raphael Cavallero
Para que consten las particulares providencias, quedio nuestro P.e tocante à
estas S.s Missiones en su último despacho, fecha 15. de Julio de 1737, comu
nicole à V. R. expresando las Consus mismas palabras, para que estas sir
van de Consuelo, y tengan mas eficácia. V.a R.a las comunicara à todos los P.e
Curas, mandandoles quesaquen Untras lado de ellas, entre las cartas y ordenes
de los P.s Generales. Dize pues su P.d muy Rev.da en la setima de las Suyas sobre
el orden de mi Antecesor, quenose Castiguen los Indios, Sinque ayga materia de cul
pa grave:
Algo, dizen, puede Contribuir à este desmayo en los Misioneros, la imposibilidad
de observar el orden, que V. R. dejo, y que à mimelo expresan muy diferentemente,
de aquello, que V. R. medize. Estoes, que no pueda castigarse el Indio, que no quisiere
trabajar en aquello, à que no esta obligado, y que solocede en servicio, y utilidad del P.e
Este orden assi es muy Conforme al precepto de mi Antecesor, de 1.o de Enero de 1707,
pues sipor el insinua de precepto se excluye el imponer les un tal servicio ò trabajo;
mucho mas queda excluido obligarlos à el con castigo. Mas à mi medizen; que el
orden de V. R.a es, que à ninguno se Castigase, sino por pecados mortales. Si esto es asi,
no solo no apruebo, sino querevoco dichos ordenes. Quemales nodeben temerse de Casti
garse los pecados mortales solamente, y que se disimule Con la natural pereza,
y desidia de los Indios? Si aun obligando los Con el Castigo, à loque es necesario pa
ra sustento, y conservacion del pueblo, son tan descuidados, y con tanta violen
cia lo hazen, quando sin este freno entiendan, que solo por pecados mortales pue
den ser castigados; que de ociosos, y degente perdida nohabra en los Pueblos? quien
cultivara las tierras para sustento desu famiglia, para las Viudas, huerfanos,
culto Divino, y servicio del Rey.
Persuadirles obligacion grave entodo esto; y que su ociosidad esculpa grave; ni esto es
assi, ni aquello asequible: con que sera preciso disimular, y consentir consu ociosidad,
origen delos infinitos males, y pecados, que pueden temerse. V. R. mismo Con
- ↑ Sembra che inizi un'altra mano.