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Muy reverendo Padre
Athanasio Kircher

Pax AA(?) tibi(?)

Mal puede la luz que esta (no debajo del celemim) sino sobre el candelero, dejar de esp-
arcir sus rayos y luces a todas partes, y mas quando es tan alto, pues no y es menos que la cabeza
de la Christianad, Roma, y la luz y resplandor tan cresides que en ella y en otras partes del mun-
so, ha esparcido la admirable sabiduria que la Divina Majestad de dios, Nuestro Senor, quiso
depositar en Vuestra Revereticia, que ha llegado ya hasta estos confines del mundo, de Nueva España
y sus Indias; admirando a loos de los estudiosos dellos con tan eruditos, raros y ad-
mirable escritos: que no solo han causado admirasion sino pasmo: A mi por lo menos me le cau-
tan grande cuando el padre Francisco Xime- nez, rector que fiie deste Colegio del Espiritii San to, me dio la noticia de los libros que Vuestra Reve- rencia le habia eiiviado, y el Catälogo de los demas que liabi'a sacado a liiz y los que trataba de imprimir, que digo, de verdad absque exagera- lione, que en mi vida me ha sii- cediclo cosa mäs admirable.

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