P. Gen.l como debo por ser la materia de su maior consuelo, y que mas repetidamente encarga en sus cartas. Algunos capitulos de ellas seran la materia de esta comun en que se vera el aprecio, que su Paternidad tiene de los gloriosos trabajos de V. R.s con algunos reparos que hace, y quiero significarlos con sus palabras que seran de mas peso y eficacia que las mias. En una de 10 de octubre de 71 para el Sup[eri]or describe de su letra estas palabras dirigidas a los Pes. Micioneros, destas Reduciones: vos estis corona mea et societatis: vos omnes amplector Missionarios, quos custodio, ut pupilam oculorum Christi cuius estis ministri primarij in salute procuranda animarum; en grande empeño ponen estas palabras tan regaladas a V. R.s ser corona de la cabeza de tan grande Padre y tan Santa Madre y niñas de los ojos de Xpto y llegar a merecer el renombre de ministros primeros en la salvacion de las almas y a la verdad quitadas las reducciones se caiera la corona de la cabeza de n[uest]ros Padres y Provincia y quedara[1]. Y en una de 30 de Diciembre me dice su Paterniad assi encomiendo con especial afecto a V. R. que embie a las Reducciones algunos sugetos que sucedan a los que estan ya impedida por viejos o por graues achaques y sean de buen espiritu y celo y que traten a los pobres indios con venignidad no con rigor. Tres cosas encierra esta clausula las dos primeras me tocan a mi que es el embiar sujetos y es lo que mas deseo y voi executando en medio de tanta falta de ellos y los que embio procuro sean de la calidad que advierte n[uest]ro P[adr]e porque los empleos apostolicos en estas Doctrinas piden varones de grande celo y espiritu los quales que es lo tercero que a ellos toca deven tratar a sus encomendados sin rigor y con toda benignidad y este es el espiritu y Dotrina del apostol de las gentes que tanto encomienda a sus amados colecenses induitebos [?] les die cap. 3, v. 12 sicut electi Dei sancti et dilecti viscera misericordiae y para vestirnos estas entrañas de miseridordia con estos pobres es necesario aia gran templança en los castigos y estos seran y no otros los que estan entablado por los ordenes que actualmente se guardan y estan aprobados de Roma y estimo como es razon el averse quitado algunos vollos que avia por ser mas conforme a la
P. Gen.l como debo porser la materia de su maior consuelo, y que mas re
petidamente encarga ensus cartas. Algunos capitulos de ellas seran la mate
ria de esta comun en que severa el aprecio, quesu Paternidad tiene delos glo
riosos trabajos de V. R.s con algunos reparos que hace, y quiero significarlos consus
palabras queseran de mas peso y eficacia quelas mias. En una de 10 de octubre de 71. pa
ra el Sup.or describe de su letra estas palabras dirigidas a los P.es Micioneros, destas Re
duciones: vos estis corona mea et societatis: vos omnes amplector Missionarios, quos cus
todio, ut pupilam oculorum Christi cuius estis ministri primarij in salute procura
nda animarum; engrande empeño ponen estas palabras tan regaladas a V. R.s
ser corona dela Cabeza detangrande Padre y tan Santa Madre y niñas delos
ojos de Xpto y llegar amerecer el renombre de ministros primeros enla Sal
vacion delas almas yala verdad quitadas las reducciones secaiera la co
rona de la Cabeza de ñros Padres y Provincia y quedara Y en una de
30 de Diciembre me dice su Paterniad assi encomiendo con especial
afecto a V. R. que embie alas Reducciones algunos sugetos que sucedan alos
que estan ya impedida porviejos oporgraues achaques y sean de buen espiritu
y celo y que traten a los pobres indios con venignidad noconrigor. Tres cosas encierra
esta clausula las dos primeras me tocan ami que es el embiar sujetos y esloque mas deseo y voi
executando en medio de tanta falta de ellos y los que embio procuro sean de la calidad que a
dvierte ñro P.e porque los empleos apostolicos enestas Doctrinas piden varones degrande
celo y espiritu los quales que es lo tercero que a ellos toca deven tratar asus encomendados
sin rigor ycon toda benignidad y este es el espiritu y Dotrina del apostol delas gentes que
tantoencomienda asus amados colecenses induitebos les die Cap. 3 v 12 sicut ele
cti. Dei sancti et dilecti viscera misericordiae y para vestirnos estas entrañas
de miseridordia con estos pobres es necesario aiagran templança enlos Cas
tigos y estos seran y no otros los que estan entablado por los ordenes que
actualmente seguardan y estan aprobados de Roma y estimo como esra
zon el averse quitado algunos vollos que avia por ser mas conforme ala
- ↑ B. Ibañez Echávarri, El Reyno Jesuitico, 55.